Pasó la noche en “la isla más espeluznante del mundo” y contó lo que vivió
Se trata del youtuber Dara Tah, quien cruzó las aguas y eludió los controles de la Policía hasta que logró ingresar a la temerosa Poveglia; qué fue lo que descubrió
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LA NACION
El youtuber irlandés Dara Tah, conocido por sus videos de aventura extrema y supervivencia en algunos de los lugares más peligrosos y misteriosos del mundo, decidió explorar un nuevo destino: la isla de Poveglia, también llamada “la isla de los muertos“. Es que en este sitio, ubicado en Italia, trasladaron unos 160.000 cuerpos de personas que murieron a causa de la peste negra en el siglo XIV. En un video de YouTube, mostró cómo logró entrar y eludir los controles policiales con su amigo Matt y filmó lo que vivieron allí.
De acuerdo con National Geographic, Poveglia fue construida como una estación de cuarentena en medio de la pandemia para evitar que se propague y, durante años, fue utilizada para aislar a los enfermos. Cuando el peligro de la peste pasó, la isla fue destinada en el siglo XX para albergar un hospital psiquiátrico. Esta instalación estuvo en funcionamiento hasta 1968, cuando la institución cerró y la isla fue abandonada.
En la actualidad, el acceso está prohibido. Esta determinación no se debe a las numerosas leyendas de fantasmas y relatos místicos que existen sobre ella, sino a meros motivos de seguridad, debido al peligro que conlleva caminar por las ruinas que no tienen mantenimiento, así como de conservación histórica.
Sin embargo, nada de esto impidió que el youtuber y su amigo navegaran hasta Poveglia, ingresaran por el agua, se treparan con una soga para saltar y, se escondieran detrás de un muro para asegurarse de que la policía no los viera. De esta forma, lograron sortear los controles de seguridad y se dispusieron a explorar el lugar. Ambos se mostraron algo asustados al explorar el lugar, pero llevaron el equipo de cámaras y ropa seca para pasar la noche.
Lo primero que hicieron fue recorrer el espacio, que estaba completamente abandonado, con los edificios destruidos por el paso de los años, las inclemencias climáticas y la falta de mantenimiento. También observaron los grafitis que estaban en las paredes de algunas de las ruinas, que daban testimonio de otros visitantes ya habían estado allí.
Al caer la noche, se dirigieron al campanario de la isla y sacaron las herramientas que utilizan los cazafantasmas para detectar calor, aunque Dara admitió que no creía que podría encontrarse con vida sobrenatural. Este tipo de artefactos se usan comúnmente en investigaciones paranormales y tienen tecnología que detecta cambios físicos en el ambiente, como temperatura, campos electromagnéticos o sonido.
Dara y Matt intentaron mantener sus dispositivos en funcionamiento a pesar de que se asustaron porque las luces de sus artefactos parpadeaban y les fallaban. Como si eso fuera poco, escucharon algunas frases en italiano, las cuales quedaron grabadas en su radio. A la mañana siguiente descubrieron, gracias a un traductor, que las grabaciones decían ‘incidente’, ‘partire’, que significa irse o viajar, y ‘scoppiato’, que se traduce como explotó.
En su regreso, el joven irlandés se dio cuenta que tenía “rasguños rojos y manchas por todas sus manos” sin ninguna explicación, ya que no se había rascado y su amigo tampoco lo había arañado. A partir de esos indicios, ambos dieron a entender que podrían haber vivido un hecho sobrenatural, pero ninguno lo confirmó oficialmente.
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