En un análisis realizado en LN+, quedó evidenciado que el país ostenta los precios más elevados en categorías de productos esenciales entre los que figuran el café, el pan y la ropa
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Comprarse un jean en Madrid o medio kilo de pan en Londres es más barato que hacerlo en Buenos Aires. Tomando como punto de referencia el costo de producción -incluyendo el tipo de cambio, impuestos nacionales y transporte-, Argentina ostenta los precios más elevados en ocho categorías de productos esenciales, superando incluso a países desarrollados.

El costo argentino: un mosaico de factores
El concepto de costo argentino hace referencia a una combinación compleja de factores que influyen en el precio final de los productos, desde el tipo de cambio y los impuestos hasta los costos de transporte y la rentabilidad empresarial.
A partir de esa premisa, el análisis presentado en LN+ estuvo centrado en varios rubros específicos, revelando la magnitud de la brecha de precios entre Argentina y otros países.
- Café instantáneo: Buenos Aires lidera el ranking mundial con un precio de US$15,96 por 100 gramos, superando a Nueva York US$13,99 y Montevideo US$13,12.
- Cerveza: una botella de 330 cc alcanza los US$2,84 en Buenos Aires, mientras que en Nueva York se consigue por US$1,83 y en Madrid por US$1,63.
- Hamburguesas: el paquete de 12 unidades de carne vacuna se vende a US$14,26 en Buenos Aires, superando los precios de Madrid US$13,01 y Nueva York US$11,73.
- Pan de mesa: el pan lactal de 550 gramos cuesta US$4,72 en Buenos Aires, mientras que en Londres se consigue por USD 2,55.
- Celulares y tablets: el precio de un celular con tecnología 5G asciende a US$2184,16 en Buenos Aires, superando ampliamente los US$1666,38 de París y los US$1331,36 de Londres.
- Neumáticos: en Buenos Aires se consiguen por US$415,68, mientras que en Londres el mismo producto cuesta US$166,18.
- Pantalón de jean: Buenos Aires encabeza el ranking con un precio de US$168,15, mientras que en Madrid se consiguen por US$124,70.

¿Es estructural o se puede corregir?
Si bien el costo argentino parece arraigado en la estructura económica nacional, los expertos coinciden en que es posible implementar medidas para corregir esta situación. La clave reside en abordar los factores que impulsan los precios al alza, como los impuestos, los costos laborales y la falta de competencia.
Por otro lado, uno de los puntos clave para reducir los precios es fomentar la competencia en los diferentes sectores. En un país con un alto riesgo empresarial, la falta de competencia puede llevar a que las empresas eleven sus precios para garantizar una mayor rentabilidad.

En el estudio presentado en LN+ también se hizo mención al teorema de Menger, planteado en más de una oportunidad por el presidente Javier Milei. El mismo menciona que cuando un fabricante fija un precio elevado para sus productos, el consumidor tiene dos opciones: comprarlo en otro lugar o no comprarlo en absoluto. Esta dinámica, que impulsa la búsqueda de alternativas más económicas, puede generar presión sobre los precios internos, algo que ocurre en la Argentina desde hace más de una década.